Fue una jornada tranquila y carente de caídas ó incidencias destacables, aunque no faltó alguna avería esporádica de alguna moto que terminó en el “camión-escoba”. Así lo indicaron los miembros de la Asociación de Amigos de Motos Clásicas de La Solana, Juan Palacios (en calidad de presidente) y Dani García, agradeciendo las frescas temperaturas registradas durante la concentración que favorecieron a motos y moteros.
La ruta arrancó a primera hora de la mañana con un recorrido urbano por las calles solaneras, desplazándose posteriormente al Pantano de Peñarroya para almorzar. También pasaron por Ruidera antes de volver a La Solana, llegando a la Plaza Mayor sobre la una y media del mediodía.
Hubo participantes de numerosos puntos de la provincia de Ciudad Real, y de otros puntos como Madrid ó Murcia, sumando cerca de setenta motos y en torno a ciento veinte personas en total. La asistencia ascendió con respecto al año anterior, gracias a la presencia de muchas asociaciones que se inscriben para devolver visita a la entidad organizadora. Palacios indicó que el grupo local también se desplaza a otras concentraciones a lo largo del año.
El pelotón lo componían motos de todo tipo, contando con auténticas reliquias andantes matriculadas hace setenta años. A su llegada al corazón de la localidad, despertaron la curiosidad de propios y extraños, mostrándose fascinados del extraordinario cuidado de estas máquinas a pesar de su longevidad.
La jornada finalizó con una comida de hermandad en Salones El Mirador del Parque y con el sorteo de numerosos regalos.
La Asociación de Amigos de Motos Clásicas de La Solana tiene programas otras dos ó tres salidas a diferentes concentraciones, según los directivos, haciendo un llamamiento a todas aquellas personas que se quieran sumar al colectivo. Por cierto, no es imprescindible disponer de moto, tan sólo tener ganas de viajar y pasarlo bien.
Fuente: eldiadigital.es